Reconozco que este apartamento es de lujo en cuanto a su mobiliario, ubicación y entorno pero, sin embargo, la limpieza brilló por su ausencia, hubo invasión de hormigas, pelos en la ducha con semi-atasco de desague, la mampara de la ducha tenía goterones, el espejo del aseo estaba rajado, no había secador de pelo, no se había barrido en varios días y la puerta de entrada tenía salpicaduras, supongo que como resultado de alguna fiesta loca.
Quiero pensar que les pillamos de sorpresa y no pudieron ponerlo apunto, de otra forma, el apelativo de "apartamento de lujo" deberían revisarlo, al igual que su precio.