El personal que trabaja allí y te atiende fantástico,. La ubicación fantástico, está en todo el centro. El alojamiento muy mal. Acceso para personas con discapacidad o mayores imposible, sin ascensor y escaleras laberínticas. Cuando llegamos no funcionaba la calefacción y la reparó la empleada de recepción, menos mal, porque hacía mucho frío. Más tarde éramos cuatro personas en la habitación y se cortó el agua caliente en la ducha cuando se estaba enjabonado la segunda persona. Ya estuvimos sin agua caliente hasta el día siguiente. En la ducha de la habitación tiene filtraciones y llega el agua hasta media habitación y por último el armario para colocar la ropa es muy muy pequeño. No lo recomiendo en absoluto